¿Te gusta consumir alcohol? Así es como afecta tu progreso en tu entrenamiento

Las salidas, eventos sociales o un fin de semana después de una semana pesada por el trabajo son el motivo perfecto para tomarnos una cerveza o un trago, lo cual no está mal, el problema es cuando caemos en el exceso, el cual trae consecuencias negativas a nuestro cuerpo y rendimiento en general.

Más allá de los efectos obvios que tiene ingerir alcohol en exceso como la resaca o cansancio, debemos tomar en cuenta que tiene afectaciones importantes en nuestros objetivos de una vida saludable y metas en nuestro plan de ejercicio.

Entonces, específicamente ¿en qué nos afecta el exceso de bebidas alcohólicas?

A continuación destacaremos 4 de las principales afectaciones que nuestro cuerpo sufre al ingerir en exceso bebidas alcohólicas, sin embargo, cabe mencionar que podemos encontrar otras afectaciones que no debemos descartar. Lo importante siempre estará en las medidas. Aquí algunas consecuencias:

Aumenta la grasa visceral

Además del peso, nuestro monitoreo debe considerar indicadores como la masa muscular, medidas e índice de grasa corporal. En este sentido, además del nivel de grasa abdominal, tenemos el índice de grasa visceral, la cual se alberga en la parte baja del abdomen. Si no cuidamos este indicador, es muy probable que desarrollemos la famosa “panza chelera”.

Dolor en cabeza y articulaciones

Los clásicos efectos de la resaca es el dolor de cabeza y malestar corporal, los cuales conforme vamos creciendo se vuelven más intensos, por ello, debemos tomar en cuenta que una noche de fiesta excesiva puede causarnos malestar varios días, lo que seguramente interferirá con nuestra dieta y rutinas de ejercicio.

Disminuye la capacidad física

Incluso cuando logramos retomar la rutina de ejercicio y plan de entrenamiento, si ingerimos alcohol poco antes, seguramente no daremos el 100% de nuestro límite, lo que representa un avance más lento en la consecución de nuestras metas.

Te deshidrata y reduce tu oxigenación

Cuando estás llevando un entrenamiento riguroso, es importante aumentar la capacidad de oxigenación y mantenerte hidratado. Cuando consumes bebidas alcohólicas, provocan exactamente lo contrario.

Te invita a romper la dieta

Por supuesto tenemos derecho y muchas veces hasta es sano aplicar un cheat meal y no estar preocupados por las calorías, sin embargo, el tema con el alcohol es que por sí solo ya tiene una carga calórica importante, que sumada a que nos genera hambre y antojo por alimentos poco sanos, se vuelve en una ingesta calórica muy importante que después tendremos que quemar sí o sí con mucho trabajo.

No queremos tomar una actitud 100% en contra de las bebidas alcohólicas o presentarlas como lo peor, pero sí es necesario que estemos al tanto y evaluemos los riesgos que tiene hacerlo en exceso de manera regular, lo mejor es apegarnos a un consumo moderado que nos permita disfrutar de los contextos sociales sin afectar otros aspectos de nuestra vida.

Para mantener entrenamientos cómodos y constantes que minimicen los efectos del alcohol, contamos con varios artículos que ayudarán a entrenar para que no te alejes de tus objetivos.

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